El hombre

Esta maniana me levante temprano y me duche. Me vesti y prepare mis cosas en un silencio casi absoluto (raro en mi-no queria despertar a mi companiero de cuarto). Una vez listo, fui a pasar mi tiempo con Dios. Parecia ser una maniana muy linda en cuanto a la buena musica que estaban pasando en el bar que suelo ir,no hacia nada de frio, solo estabamos ahi dos personas. Me sorprendio ver que otra vez cambiaron la moza. No se, tal vez las van rotando...
En fin, todo estaba tranquilisimo hasta que llego este hombre que parecia ser-para mi gusto- demasiado amable. Pidio algo, y mientras lo tomaba parececia murmurar algo,lo raro era que estaba solo. Sobre la mesa habia un libro(fotocopiado)por lo que pense que era un estudiante, aunque su edad lo delataba...parecia tener unos 40.
De todas formas,hasta ese momento todo estaba a full.De repente, un chico de unos 24 anios entra al lugar y se sienta en su mesa, era inevitable poder no escuchar lo que estaban diciendo, mas teniendo en cuenta que la mesa en la que estaban sentados estaba junto a la mia. El chico parecia disculparse por haber llegado tarde, pero al hombre no parecia importarle demasiado.
Lo que a mi me importo un poco es que el estimado senior comenzo a hablar, pero usando un tono medio alto, mas teniendo en cuanta el lugar en el que estaba, como si quisiera que lo escucharan...trate de concentrarme en lo que yo estaba haciendo, pero la verdad es que soy una persona muy dispersa y tiendo a distraerme con cualquier cosa.
En uno de esas subidas de tono, escuche la palabra "masones"...y dejenme decirles que por lo poco que pude entender de esa conversacion, creo que el hombre es parte de ellos...si es que "ellos" significa algo.
Lo que me puso mal es que el chico parecia estar buscando un significado para su vida...por las pocas veces que hablo (en general el hombre tenia la palabra), paracia estar perdido y muy confundido.Senti ganas de levantarme de la mesa y acercarme para decirle al flaco que no se dejara enganiar, pero no tuve el coraje de hacerlo...no se por que!
Mi humor no era el mismo con el cual habia llegado, asi que decidi cerrar mis Biblia, mi Sermon de la montania y mi cuaderno y sali para mi departamento.
Me senti frustrado, pero a la vez pienso que yo no soy nadie para meterme e interrumpir la canversacion de nadie...tenemos derecho a escuchar, hablar de lo que queramos...el punto es quien dice que.